miércoles, octubre 31, 2007

Cuando se Pierde La Paciencia

He visto a muchos perder la paciencia, y a veces en el momento menos indicado, y el menos pensado tambien.
Ahi aflora la verdadera persona, sin mascaras, sin poses, sin el pensar con filtro, sin meditar palabras, sin cuidadas ideas, sin el silogismo educado que adorna epitetos, calificaciones, sin siquiera recurrir a la ironia, sale todo de golpe, como un vomito íntimo desde el fondo de tu alma. y es ahi cuando uno se muestra como persona.

A veces la persona se muestra tal cual es cuando cree ser superior a los demas, cuando se siente a sus anchas, cuando piensa erroneamente que "domina en su cancha".
He visto a muchos creerse el cuento cuando un par de "pseudo amigotes" les palmotea la espalda y les da el amen a cada cosa que dicen o hacen.

Tuve un conocido que era tan poca cosa, tan acomplejado y amargado que se refugiaba en escribir el diario del colegio. Desde ahi apuntaba sus dardos ridiculizando y menoscabando a cuanto tipo el pensaba que era "atacable", "despreciable", menos que el y que merecia ser denostado. Todo le funciono perfecto hasta que algunos lo agarraron a la salida del colegio, aparte de agarrarlo a patadas y botarle un par de dientes salvo ileso, y se le quitaron las ganas de seguir escribiendo el pasquin del colegio. No se si ahora sera algun periodista farandulero famoso, pero se que en ese momento le hicieron tragar cada una de sus palabras y le tomo el peso a que lo que escribes es un arma poderosa que se puede volver contra ti.

En fin, esas son cosas que me preocupan, sobre todo porque ultimamente yo he perdido la paciencia.
El sabado pasado sin ir mas lejos me encontre cara a cara con el vecino del frente, y se me ocurrio que era el momento oportuno de decirle en su cara y sin anestesia todo lo que pienso de el.
En un momento hasta pense en lanzarle un golpe y romperle la cara, pero me arrepenti al darme cuenta que eso me rebajaria exactamente a su lugar, y me remiti a dejarle en claro que el gusano es el, y no yo. Lo que si me molesto es que el tipo se fue caminando y al llegar a la esquina comenzo a lanzarme insultos. Tenia dos opciones, o salia corriendo y lo agarraba a la vuelta de la esquina a patadas, o me reservaba para el proximo encuentro cara a cara. Opté por lo segundo.

No es la primera vez que pierdo la paciencia, ni sera la ultima.
Solo espero no mostrar la hilacha, y quedar como un prepotente. Solo deseo quedar como alguien que no se deja pisotear y alega en razon. Lo que no soportaria es quedar como un acomplejado amargado, narcisista y egolatra. Se que el mundo no gira a mi alrededor, y siempre he querido pasar lo mas piola posible, no pretendo que nadie gire alrededor mio, ni ser mucho menos el guru de nadie. A veces quienes se creen gurús son presas de sus propias palabras y actitudes...

Pensar en perder la paciencia me preocupa...
Solo espero no perderla a bordo de un bus del transantiago y agarrar a patadas en la cabeza al chofer... eso seria grave.

Que lo pasen bien, un saludin del Kami

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ciertamente que estamos adscritos a normas sociales para un mínimo que evite la anarquía; pero cuando hay alguien que viola ese margen de modo flagrante y hasta insolente, la única forma de reencausarlo es bajando a su nivel.

Lo grave en estos tiempos de Blogs es que hay quienes se esconden en las sombras del anónimato que les da un seudónimo para disparar a mansalva contra lo que no parezca acorde a sus intereses...y claro, así el sujeto en cuestión no es fácil objeto de una querella.

Yo creo, estimado amigo, que se puede encontrar un paso intermedio entre la indiferencia y sacarle la cresta al vecino aquel. Saludos cordiales.

Rodrigo León dijo...

No pierdas la paciencia Kami, que después cuesta mucho encontrarla!...
Un abrazo y pasa por mi blog para apoyar mi campaña

"LEÓN DESDE LAS 6"

Un abrazo
Rodrigo León

ALEJANDRO MUÑOZ ESCUDERO dijo...

Hola mi nuevo y buen amigo.

En primer lugar quiero manifestar mi mas sincero agradecimiento por tus valiosas palabras de apoyo en mi blog.

Respecto de tu post, yo fui uno de aquellos que no conocía la paciencia ni de nombre, pero los años y la experiencia fueron suavizando mi intolerancia.

Hoy, aunque estoy inválido, creo haber subido varios peldaños en el ámbito espiritual y puedo ver desde la tribuna como se sacan los ojos unos a otros.

Sé feliz querido amigo y cuando se presenten aportunidades ingratas, simplemente cruza a la vereda del frente.

Como concepto final te dejo una frase de Mahatma Gandhi :

"Ojo por Ojo ... y el mundo quedará ciego"

Un fuerte abrazo y que Dios te bendiga,

Alejandro