Hace algunos años...

Cuando viví en Estados Unidos (aparte de pasarlo bien y conocer algo), estuve trabajando con muchas personas del mundo de la música, pude estar en "Criteria Studios", "MidiLand" (En esa epoca estudio de Rudy Pérez), "Flavor Sound" en Miami Beach, propiedad de Julio López, un español que con su señora esposa Antonia forman una pareja encantadora, y quien trabaja con Alejandro Jaen. También trabaje en "Platypus Productions", un estudio en Miami Dade, enclavado cerca de Coconut Grove, propiedad de mi amigo personal José "Kiki" Villalta, donde han grabado importantes personajes de la historia musical internacional, (ahi estuve compartiendo largas tardes de grabacion con Mario Clavel, con quien recordamos muchos hermosos boleros de los que no tenia idea su autoria, y la verdad, me emocionaba como compositor saber que algunos boleros tan conocidos y escuchados hasta el cansancio, eran de el), entre otros importantes personajes. La gracia de Miami es que es pequeño, se conocen todos porque el circuito artistico es muy limitado para los latinos.

Una noche me dijeron que habia un chileno tocando en un local por ahi cerca, y que causaba sensacion. Me dijeron -"Vamos a verlo, seguramente lo conoces porque debe ser reconocido en tu pais"- y parti con mi grupo de amigos. Cuando llegamos al local (vi la carta para asegurarme de no tener una sorpresa al pagar la cuenta) decidi pasar una noche de calma y solo pedi un vaso de soda (lo mas barato era un vaso de vino por 100 dolares, y no era un gran vaso). Ahi salio a actuar el, un ser de mediana estatura que aparecio despues de actuar un grupo sensacional con unos musicos dignos de Chick Corea o de otros de su talla, donde una niña cantaba como una diosa, con cada melodia jazzeaba que daba gusto y con sus frases graves me paraba cada pelito del cuerpo.

Se ubico caminando rapidamente como si tuviera piernitas cortas entre una maraña de teclados, aproximadamente seis o siete, todos unidos por sus respectivo cables midis, por lo que rapidamente me di cuenta que ahi habia un sequenciador que dirigia toda la orquesta, y por el reducido tamaño, una bateria Roland o Alesis, por su color oscuro. Y comenzo la actuación. Se hacia llamar "El Hombre Orquesta", y durante la actuacion se paraba, saltaba, gesticulaba a veces como si estuviera pisando un cable pelado de 220 volts (bueno... 110), con caras de hacer un tremendo esfuerzo. A mi me causo gracia porque todos lo encontraban sensacional, y yo sabia que solo echo a correr una secuencia, y hacia como que tocaba todo. En un momento de la actuacion, dejo el teclado solo y tomando un microfono se puso a cantar alrededor del teclado, que seguia sonando completamente solo.

Al acabar su performance, lo aplaudieron casi como despues de escuchar a un Mozart tocar alguna de sus celebradas obras. Yo estaba incredulo y me di cuenta de lo ingenuos que son algunos que no tienen la mas remota idea de que un teclado puede tocar solo. Me parecio divertido que el sonriera satisfecho de su actuacion, como si realmente hubiera hecho un enorme esfuerzo aparte de presionar la tecla "play". A este mismo personaje lo vi despues en un programa de Sabado Gigante, se volvio a presentar en un concurso como "El Hombre Orquesta", hizo mas o menos una corta presentacion tocando un par de canciones pregrabadas, y al finalizar todos lo aplaudieron como si fuera un Arrau.

Mira como han pasado los años...
Este mismo personaje se presenta al "Festival de Viña del Mar " en su version aniversario numero 50. No se quien habra sido el ocurrente que lo propuso de jurado a Viña, deberian hacerle un sumario por tonto. En esta oportunidad, adelantadose a la posibilidad de ser pifiado por sus nulas aptitudes de tecladista, musico o cantante, regala a toda la Quinta Vergara, un lomitón... (ahora pienso que bobos fuimos, si hubiera seguido de candidato a presidente cada chileno hubiera tenido un vale al lomiton gratis).

Estas cosas me hacen reflexionar en lo mucho que hemos crecido culturalmente en Chile...
Sabemos apreciar cabalmente a quien nos regala un sandwich (hace años atras esto hubiera sido mal visto), sabemos apreciar musicalmente a quien sabe manejar el sequenciador de un teclado, y se maneja muy bien con el cablerio midi (esto hace unos años atras hubiera sido inaceptable, recuerdo lo mucho que se critico a Umberto Tozzi por haber hecho over playback en la Quinta Vergara en el Festival del año 80), y ademas somos ya bilingues. (la rutina de Dinamita Show estuvo hablada en ingles y todo el mundo rió sobre entendiendose que comprendió lo que se decia, lo cual es un merito de nuestras politicas educacionales).

Durante mi estadia en Estados Unidos, tambien creci como arreglador, como musico y tambien como persona. Las cosas no se me dieron fáciles en un comienzo y durante mis tres primeros meses solo hablaba para saludar y despedirme al llegar y al irme del trabajo, lo cual me hizo pensar seriamente en la posibilidad de perder capacidad de habla... pero sobreviví, lo que me hizo darme cuenta de la validez de demostrar que vales lo que vales, de lo que eres capaz de hacer, y de demostrar tus capacidades. En USA no importa que llegues con pergaminos, no valen los titulos o lo bien que alguien hable de ti, tu siempre al llegar seras un don nadie, te ganaras el respeto de los demas y seras apreciado en tus capacidades solo cuando demuestres que eres capaz de enfrentar y solucionar problemas.

Saludos a todos...
Hasta la proxima.